A veces no sé si te soñé. Te vas dejando huella, te vas marcando vidas, te vas doliendo almas, y lo amargo de tu adiós es lo que hoy tengo.
Experiencias que explotan y remueven, llegaste y te fuiste en un instante, quisiera detenerte, pero sé que eres aire, que la vida te trajo solo para probarme que estoy viva, pero eres prestado, y tengo que dejarte ir.
Hay cosas que nos marcaron y que serán solo nuestras, la amistad siempre presente, el miedo, la fascinación, el cariño, el agradecimiento, el apoyo, el deseo, la magia, lo especial, lo irresistible.
El dolor envuelve, y tu ausencia pesa, tu sonrisa, tu mirada, tus manos, tus pupilas… cierro los ojos y te veo dentro, respiro tu aroma y te siento aquí, tus labios en mi boca, tus manos en mi cuerpo, tus ojos en los míos, tu esencia en el ambiente
Tu aliento aparece de vez en cuando en mi memoria, y sonrío al verte aunque sea en mis sueños.
Efímero y fugaz, así llegaste, así sabías, y así te fuiste. Intangible como un sueño, y tan real como un recuerdo